Escalada deportiva y aventura

Por Fernando Orús.

Escalada deportiva:

Con esta nueva mentalidad, que entre otras cosas trae una nueva escala de graduación cardinal abierta (6a, 7b, etc), frente a la ordinal tradicional (Vº, VIº…) se consiguen  espectaculares vías en la Visera y en el Pisón, como La “Chinatown” o la “Zulu demente” de la Visera (ambas abiertas en 1983 por Fernando Gutiérrez, Fernando Caballé, Santiago Buennaudas  y”Shaino”) o “Mi padre tiene sed” al Pisón, también de Gutiérrez y Caballé, con J. Aranaudas y Juan, escaladas que surcan estos formidables extraplomos de forma directa, en atléticas pruebas de fortaleza física y mental. 

Las primeras vías “deportivas” se abrieron desde abajo pero en seguida se adoptó por algunos la regla mucho más práctica de equiparlas previamente desde arriba para escalarlas después.  Riglos abre sus puertas a la “escalada deportiva” y al grado 7º de dificultad.  El objetivo es escalar exclusivamente en libre con un desarrollo formidable de la habilidad trepadora, posible por la absoluta garantía que ofrecen los nuevos seguros tipo parabol. Riglos se dotará en los años siguientes de un sólido catalogo de vías “deportivas” fundamentalmente abiertas en los gigantescos extraplomos del Pisón y de la Visera, reconocida esta última como el “superrocodromo” de Europa por su magnífico extraplomo de más de 200 m y 40 m de salida! La vía “La fiesta del bíceps” a la Visera (Gutiérrez-Arnaudas y varios compañeros, 1984) quizás sea el paradigma de esta época. Escalada de 7a, es una de las vías más recorridas de los Mallos, con una fama internacional justamente merecida. Para asombro de propios y extraños Carlos García escaló en solo integral esta vía en 1989,  aventura extrema de la que la revista Desnivel publicó unas impresionantes fotos.

Escalada de aventura:

Como es lógico, los diferentes estilos y concepciones de la escalada conviven en Riglos, En esos años Fernando Cobo abrió dos nuevas vías en la Visera, fiel a su impecable estilo aperturista desde abajo y con el mínimo espitaje, La “Ley de guerrero” (Cobos-Hernández, 1985) y “De naturaleza salvaje” (Cobo-Murcia). En la misma línea y estilo, Jesús Gálvez y Adolfo Medinabetia abren la vía “Nautla” en la cara norte del Pisón, a la izquierda de la vía de Verano.

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